Invertir en renta fija o en renta variable, en lugar de guardar el dinero va siendo cada vez más característico de la persona ahorradora o el empresario que mueve su capital para hacerlo crecer.
Pero si pretendes tener una cartera consolidada de inversión y quieres meterte en nuevos mercados, antes debes plantearte qué proporción derivar a la renta fija y qué proporción derivar a la renta variable.
Por ello, en este post vamos a resumir en profundidad qué nos aporta cada una de ellas. No sin antes preguntarte a ti mismo los siguientes aspectos:
- ¿Qué tipo de inversor eres?
- Conservador
- Agresivo-arriesgado
- ¿Sueles arriesgarte por la rentabilidad que puedes llegar a obtener?
- ¿En qué situación te encuentras? (recursos de los que dispones actualmente)
- ¿Tus objetivos son a corto o a largo plazo?
- ¿Necesitas asesoramiento? ¿o eres capaz de hacerlo de forma independiente?
Renta fija
La renta fija son las herramientas financieras como los bonos (emitidos por el Estado o Comunidades Autónomas) de deuda pública. Pero también existen bonos corporativos o pagarés, que serían los de carácter privado. Tanto unos como otros, conllevan unos intereses relacionados y una fecha límite de vencimiento.
Por lo que si inviertes en renta fija comprando un título debes saber que cada cierto tiempo recibirás unos intereses fijos y que se te devolverá el capital inicial al final del último plazo o fecha límite. Por ello su nombre es renta fija, porque antes de invertir sabes lo que vas a recibir, los plazos, las condiciones…
- Hay distintas formas de invertir en renta fija:
- Compra de un bono del Tesoro español o de una empresa.
- Invierte en un fondo de inversión de renta fija (corto y largo plazo, renta fija española / europea…).
Un inversor conservador es el que se dedica a este tipo de renta. Ya que, es más continua por así decirlo porque se invierte en un mercado poco cambiante.
Ventajas
- El tiempo es un riesgo, pero la rentabilidad es un tesoro fijo en los plazos ya que más o menos, a mayor tiempo de finalización de un vencimiento mayor rentabilidad obtendrás en los plazos.
- Viabilidad a través de fondos de inversión para invertir en bonos conjuntamente o dejarlo en manos de profesionales.
- Tiene fecha de vencimiento y sabes cuándo te devolverán tu capital invertido, así como los intereses por plazos. Todo ello, lo sabes antes de invertir.
- Rentabilidad mayor a largo plazo (si se mantienen los bonos o la inversión hasta la finalización del plazo).
Desventajas
- Riesgo de impago si la fecha tiene un plazo muy largo.
- Mayor dificultad de inversión en bonos.
- Menor ganancia o retorno potencial frente a la renta variable.
Renta variable
La renta variable son las inversiones en acciones de empresas o que cotizan en la bolsa. En el mercado son muchas las empresas que cotizan: bancos, empresas, aerolíneas, industrias… Las ganancias o beneficios se reparten en dividendos o por la compraventa en el mercado de acciones.
A pesar de que se entreguen dividendos anualmente, no se debe confundir con la renta fija, porque la empresa tiene el poder de dejar de repartir dividendos. De hecho, suelen repartírtelos cuando generan beneficios muy elevados por la gran cantidad de accionistas que hay.
Además, tiene un riesgo mayor que la renta fija y no hay ningún interés que recibas de forma “fija”, ni se devuelve la inversión del capital inicial en ningún momento. Es decir, no hay plazos/intereses.
Y no se debe tampoco confundir con la renta fija porque su propio nombre debe darnos una pista de que no son iguales. Se le denomina renta variable porque la inversión sube o baja y varían los dividendos, oscila el precio de las acciones… Y, por tanto, el inversor puede recibir menos de lo que se ha invertido o apostado.
¿Y por qué esta variación? Principalmente varía en función de los resultados de la empresa y su actividad aunque también se puede ver afectado por factores sociales, económicos e incluso políticos. El gran ejemplo hoy día de estos factores es la gran bajada que tuvo la bolsa española hace 5 días: el Ibex se desplomó con un 14,06% por primera vez en su historia.
Por el contrario, a mayor riesgo tienes más probabilidades de obtener mayor rentabilidad. Por ello, sueles encontrar compradores fácilmente o si sabes aprovechar el momento oportuno de la inversión y/o retirada. Entonces, el beneficio es mayor.
- Hay distintas formas de invertir en renta variable:
- Compra de acciones de forma directa (mediante una gestión que se llevará comisión).
- Invierte en un fondo de inversión de renta variable (corto y largo plazo, beneficios fiscales, mayor diversificación de mercado…).
- Un inversor agresivo es el que se dedica a este tipo de renta. Ya que es una inversión de mayor riesgo porque se invierte en un mercado muy cambiante con muchas más posibilidades de perder el dinero que invirtiendo en renta fija.
Ventajas
- Mayor liquidez, no tiene fecha de vencimiento.
- Rentabilidad mayor a corto plazo.
- Mayor ganancia o retorno potencial frente a la renta fija.
- Diversificación de mercado a través del fondo de inversión.
Desventajas
- Que las acciones bajen (riesgo).
- Costes de la inversión directa mediante un gestor.
- Mayores pérdidas
- Mercado muy cambiante
- No recibes intereses en plazos
Entonces, ¿qué es mejor la renta fija o la variable?
Si tienes que decidir qué es mejor si la renta fija o la variable, va a depender de tu perfil de inversor. Es lógico decantarse por la renta fija si eres conservador y lo que quieres es guardar tu dinero y arriesgarte con posibles pérdidas. Aunque si diversificas tu mercado en las inversiones en bolsa, no tiene por qué irte mal. Está claro que las acciones llaman mucho y al final mucha gente realiza este tipo de inversión. Por el contrario, si te gusta el riesgo, la renta variable es tu mejor opción.
Pero entre la renta fija y renta variable, quizás, sea la primera la inversión más cómoda para recibir un retorno a plazos y recuperar tu desembolso inicial. Aunque, es cierto que existen varios estudios que dicen que la renta variable es el activo que consigue ganar de forma continua a largo plazo a la inflación, sobre todo si nos fijamos en los índices bursátiles.
Por otro lado, tarde o pronto un inversor, sea conservador o agresivo, termina cayendo en un fondo de inversión. Que no quiere decir que sea un inconveniente, simplemente, todo inversor acaba pasando por uno de estos, debido a la comodidad de inversión dado que no gestionas nada ni debes preocuparte en qué empresas invertir. Depende también a qué tipo de inversión se dedique el fondo, ya que como hemos visto, los hay de renta fija y renta variable. Aunque de manera general cuándo oigas hablar de fondos de inversión, serán todos de renta variable.
Así que, si quieres saber que es mejor entre las inversiones de renta fija e inversiones de renta variable, en definitiva, son dos maneras distintas de invertir. Donde, en muchas ocasiones se complementan para elaborar una cartera equilibrada.