En el mercado existen diferentes tipos de préstamos y cada uno tiene sus propias características. Por lo tanto, es esencial saber cuáles son para tomar la decisión más adecuada.
Conoce todo sobre los préstamos con garantía personal, los riesgos que implican, las condiciones generales y lo que debes saber en caso de no poder pagar.
Condiciones de los préstamos de garantía personal
Un préstamo de garantía personal es una obligación legal del cual, una persona, tanto física como jurídica, es financieramente responsable en caso de que no pueda pagar el financiamiento. Es decir, si el propietario de un negocio firma una garantía personal como parte de un contrato de préstamo, debe cubrir la deuda con activos personales en caso de incumplimiento del pago.
Es un método de respaldar un préstamo tomando como aval la solvencia del deudor con sus bienes y derechos. Al solicitar este tipo de crédito personal, se evalúan los fondos disponibles y los que se esperan que reciba en el futuro.
A pesar de los riesgos para los bienes personales, vale la pena firmar una garantía personal, puesto que ayuda a fortalecer la solicitud, especialmente si la empresa tiene un historial crediticio deficiente o no tiene historial.
Es importante conocer las condiciones de los préstamos personales, aunque cabe resaltar que son diversas, puesto que varían en cada caso según la entidad financiera, el aval entregado y la situación personal de la empresa.
Cuantía Máxima
Según las necesidades se pueden solicitar préstamos de garantía personal con un menor o mayor importe. Estos créditos suelen estar entre los 200 y 75.000 euros, no siendo habitual superar esta cuantía, puesto que no es habitual tener un importe elevado.
Plazo de devolución
El plazo de devolución de los créditos personales suele ser a corto plazo, generalmente menor a 10 años.
Además, cabe destacar que el deudor puede liquidar anticipadamente el dinero que debe, pero el prestamista tiene derecho a una compensación, según las condiciones y el período en el que se encuentre el préstamo.
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Tipo de interés
El tipo de interés de los préstamos con garantía personal puede ser fijo, es decir, las cuotas son constantes durante su duración. También puede ser variable, es decir que las cuotas pueden ser diferentes a lo largo del tiempo.
Sin embargo, lo más habitual de los créditos personales es que estos suelen ser fijos, habiendo muy pocos préstamos de este tipo con un interés variable. El precio medio aproximado de los préstamos personales en España suele rondar entre el 5% – 10 %.
Cuáles son los avales
En un préstamo personal se permite entregar como aval todo el patrimonio, tanto de tipo solidario como mancomunado. Por lo general, los activos podrían incluir sus cuentas corrientes y de ahorro, vehículos y bienes raíces (como su casa). Es decir, el prestatario responde con el conjunto de su patrimonio, pero sin afectar a ningún bien en concreto.
Es importante saber qué se incluye en la garantía porque debe nombrar los activos en riesgo si el préstamo entra en mora.
Qué hacer en caso de no poder pagar
El titular del préstamo y las garantías personales tienen las mismas obligaciones y condiciones. Entonces, ¿qué hacer si se presenta la situación de no poder hacer frente al préstamo con garantía personal?
Al ofrecer como garantía todos los bienes presentes y futuros, en una situación extrema, puede que los bienes sean embargados hasta cubrir el importe de la deuda.
Lo más recomendable si no se puede pagar la cuota del préstamo es acudir a la entidad bancaria para explicar el caso particular. Por norma general, suelen ofrecer una solución como establecer un plazo de amortización más amplio para que las cuotas sean inferiores o establecer un periodo de carencia de capital en el que solo se pagan los intereses.
Estas soluciones son a corto plazo y la deuda crecerá con el paso del tiempo, pero es una buena opción si no se puede pagar durante un tiempo por una causa especifica. La entidad suele preferir cobrar que comenzar en un proceso judicial.
Si estas soluciones no son posibles, la única alternativa posible es declararse insolvente, tanto si eres persona física como jurídica. Esto se debe realizar ante un concurso de acreedores que paraliza las demandas interpuestas por falta de pago y se paraliza la posibilidad del embargo hasta que el proceso termine.
Ejemplos de préstamos de garantía personal
Los préstamos personales pueden ser aptos para empresas, autónomos o personas físicas. Cabe destacar que el deudor puede seguir utilizando los bienes que son aval sin limitación, tanto vendiéndolos, gravándolos o donándolos.
Cómo ves los préstamos con garantía personal tienen condiciones generales diferentes según la situación y la entidad financiera. Lo más recomendable es pedir información para conocer de forma específica cada una de las condiciones.