
Entender cómo tributan los préstamos entre empresas no vinculadas es importante para gestionar estas operaciones de forma correcta y ajustarse a las normativas fiscales. Este tipo de préstamos implican particularidades en su tributación y en su tratamiento fiscal en el Impuesto de Sociedades.
Antes de tomar un préstamo siempre es recomendable estar informado en los detalles de su tributación y demás cuestiones. Aquí en Vannilo Holding te explicamos de qué se tratan los préstamos entre empresas no vinculadas y cómo es su tributación.
¿Qué son los préstamos entre empresas no vinculadas?
Los préstamos entre empresas no vinculadas son operaciones de financiación que se realizan entre compañías que no tienen una relación de vinculación directa, como una participación en el capital o en los derechos de voto. Son empresas independientes la una de la otra.
Estos préstamos permiten mejorar la liquidez de una empresa y flexibilizar el acceso a recursos sin recurrir a entidades financieras externas. Además, la empresa que concede el préstamo obtiene rendimientos financieros en forma de intereses.
Tratamiento fiscal de los préstamos entre empresas no vinculadas
La gestión de estos préstamos y su tributación debe cumplir con ciertos requerimientos fiscales:
- Aplicar un tipo de interés acorde al mercado: el tipo de interés de este tipo de préstamo debe estar alineado con los tipos de interés de operaciones similares en el mercado. Hacienda revisa este aspecto para evitar intereses bajos o elevados que afecten la base imponible del Impuesto de Sociedades.
- Declaración de los intereses recibidos y pagados: la empresa que concede el préstamo debe declarar los intereses como ingresos financieros. Mientras que la empresa prestataria, por su parte, deduce los intereses como gasto financiero.
- Documentación de la operación: contar con un contrato claro que detalle las condiciones del préstamo (plazo, tipo de interés, condiciones de pago, etc.) permite una mayor transparencia y facilita el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Tributación de los intereses en préstamos entre empresas no vinculadas
En cuanto a la tributación de los intereses generados, existen diferencias según la posición de cada empresa en la operación:
- Empresa prestamista: los intereses generados por el préstamo se consideran ingresos financieros que deben tributar en el Impuesto de Sociedades. Estos ingresos se incluyen en la base imponible y se aplican los tipos impositivos correspondientes.
- Empresa prestataria: los intereses pagados son deducibles en el Impuesto de Sociedades. La deducción de estos intereses está sujeta a límites. Según la normativa, los gastos financieros netos deducibles no deben superar el 30% del beneficio operativo de la empresa, con un límite de un millón de euros.
Este tratamiento de los intereses permite a ambas empresas realizar operaciones de préstamo de manera eficiente, siempre y cuando se ajusten a los límites fiscales establecidos.
Requisitos para la deducción de los intereses en la empresa prestataria
Para que los intereses del préstamo sean deducibles, la empresa prestataria debe cumplir con ciertos requisitos:
- Límite de gastos financieros netos: la deducción de los gastos financieros está limitada al 30% del beneficio operativo de la empresa.
- Aplicación del límite de un millón de euros: si los gastos financieros netos de la empresa no superan el millón de euros, la deducción es aplicable en su totalidad, sin tener en cuenta el 30% del beneficio operativo.
Para empresas con necesidades de financiación elevadas, como startups o sectores intensivos en capital, estas limitaciones pueden suponer un factor a considerar en su estrategia de financiación y en la gestión de sus pasivos financieros.
Ejemplo práctico: cálculo de intereses y su deducibilidad
Para ilustrar mejor el tratamiento fiscal de los intereses en un préstamo entre empresas no vinculadas, veamos un ejemplo sencillo:
- Empresa A concede un préstamo de 100.000 euros a Empresa B a un tipo de interés del 5% anual.
- Empresa B paga 5.000 euros en intereses al año a Empresa A.
- Empresa A incluye esos 5.000 euros como ingresos financieros en su base imponible.
- Empresa B deduce esos 5.000 euros como gasto financiero, siempre que no supere el límite del 30% de su beneficio operativo.
Este cálculo permite gestionar los intereses sin afectar el resultado de explotación de cada empresa, siempre y cuando cumplan con los límites establecidos.
Consejos para gestionar la tributación de los préstamos entre empresas no vinculadas
Para llevar a cabo este tipo de préstamos es importante asegurar una correcta tributación y optimizar su fiscalidad. Aquí presentamos algunos consejos que pueden servirte de ayuda si está en la gestión de un préstamo de empresas no vinculadas:
- Mantener un contrato de préstamo detallado: contar con un contrato que defina claramente el tipo de interés, el plazo y el método de pago.
- Aplicar intereses de mercado: utilizar un tipo de interés similar al del mercado asegura que Hacienda no cuestione la operación.
- Registrar los intereses correctamente: tanto los ingresos como los gastos derivados del préstamo deben reflejarse claramente en la contabilidad de cada empresa.
- Buscar asesoramiento fiscal: contar con el apoyo de un asesor especializado ayuda a evitar sanciones y a maximizar las deducciones posibles.
Evita incumplimientos fiscales y optimiza la financiación
Gestionar correctamente la tributación los préstamos entre empresas no vinculadas evita problemas con las normativas fiscales y optimiza la financiación. Llevar un registro adecuado de los intereses, aplicar tipos de interés de mercado y mantener contratos claros evita problemas con Hacienda.
Además, cuando las necesidades de inversión de una empresa son considerables, conocer estas pautas puede marcar la diferencia, tanto en la planificación financiera como en el control de su fiscalidad.